Como dice el conocido refrán: "más vale prevenir que lamentar", y todos los profesionales del Mantenimiento Industrial lo tenemos claro desde hace tiempo. Algunas veces, tan solo nos falta un análisis adecuado ( y un poco de tiempor para hacerlo), para lograrlo.
En el caso de la Prenvención de la contaminación de los Aceites lubricantes y/o aceites hidráulicos, está demostrado que el coste de un Mantenimento adecuado que evite la llegada de las partículas contaminantes al aceite es un 10% aprox. de lo que después nos costará eliminarlas, sin contar los daños causados en el equipo o máquina el funcionamiento con un Aceite lubricante sucio.
Listemos pues unos simples puntos por donde no debemos permitirlo:
- Ventilación y Respiraderos, con una correcta ubicación de los mismo, y la utilización de Filtros específicos para aire en los respiraderos.
- Nuevos Aceites, debemos ser muy cuidadosos cuando realizamos las operaciones de llenadode aceites, rellenado o sustitución.
- Juntas, un lugar habitual de entrada de polvo y suciedad a los ciruitos hidráulicos. Veamos cualquier mínima fuga o aprtura como un acceso libre.
- Limpiezas, la utilización de productos químicos en fijación de rodamientos o cojinetes, cerrado de tapas, limpieza de residuos, etc puede dejar impurezas que dañen de forma importante cualquiera de las muchas propiedades de nuestro Aceite.
- Virutas, de muchos elementos metálicos, por desgaste, arrancamiento o tras una reparación mecánica en una reductora, sustitución de rodamientos, apertura y cierre de tapas, registros o carter de un motor.
- Rotura de filtros, una rotura de un filtro de aceite hidráulico o lubricante echará por tierra su trabajo de filtrado de cientos de horas; debemos prevenirlo y evitarlo al 100%.
